Ese fue mi peso de hoy.
Estoy con números altos, pero al menos ya no toco el 70 cada vez que tengo un bajón, llego a 67 kg, 3 kilos menos que no tengo que volver a bajar luego de una caída.
La próxima semana vuelvo a la u, luego de las vacaciones de invierno, lo que me agrada, ya que no tendré toda la comida que tengo en la casa, o sea, allá igual como, pero las porciones son menos, aunque estando en casa, no he comido taaaaaanto como solía hacerlo.
He comenzado a hacer abdominales, siempre me han costado mucho, pero he comenzado por los que me son más fáciles.
No estoy con ganas de hacer rutinas de ejercicio, siempre termino abandonando, pero si hago ejercicio localizado, y no tan largos, pero constantes, creo que si comenzaré a obtener resultados.
Lento pero seguro.
Quiero ser delgada, siempre lo he querido, o me lo inculcaron y no siempre lo quise, no sé.
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Si paso septiembre bien, la psiquiatra me dará el alta.
Ya han sido 2 años y unos meses de todo este tratamiento, de todas estas pastillas y controles mensuales.
Ahora me puedo controlar, estoy mejor, lo veo día a día, pero esto de la comida creo que va más allá, no se si de esto una se recupera, no lo creo.
Como, y como mas controlada, ya no tengo esos atracones, a veces tengo ansiedad, y como harto, pero no son atracones.
Sé que el pesarme todos los días, pensar en que lo que he comido es suficiente para que en la mañana la balanza no marque un número superior, el mirarme todos los días al espejo fijándome si me veo mas grande, como siempre o mas pequeña, si algo ha cambiado o sigo igual, y otras cosas más, no es normal, no es algo que una persona "sana" haría, pero ya no es algo que me prohíbe seguir con mi vida, o sea, ya no es tan "fuerte" como antes, y creo que puedo vivir con esto.
Había leído la entrada pero no sé que comentar... Sobretodo porque no sé si concuerdo con tu punto de vista en todo caso lo respeto y espero de corazón que puedas estar bien
ResponderEliminarLo que más me gusta de todo este asunto es que estás siendo honesta contigo, conoces tus restricciones e inseguridades, pero al fin no estás permitiendo que ello te estanque por completo. Me alegra saberme mejor, más fuerte, más centrada y menos preocupada.
ResponderEliminarDiría que lo que debes continuar desarrollando es la capacidad de desprendimiento, es decir, dejar ir las trabas mentales, los prejuicios de ti misma, esas ideas obsoletas e injustas que te inculcaron y todo aquello que no te permita ser tú, libre y satisfecha.
Sé que en general, a la mayoría de las personas nos cuesta estar en completa paz con nosotros mismos. Soy consciente sobre lo lejanos que a veces estamos de sentirnos satisfechos y conformes con nuestro cuerpo, con nuestro modo de ser y hasta con nuestras capacidades. Sé que sonará cliché, pero nos falta mayor conocimiento sobre nuestra persona y descubrir qué patrones nos han sido heredados, ya por parte de la familia o ya por la sociedad. Sólo entonces es que entenderemos que hay un montón de ideas y conceptos que no son realmente nuestros.
Aunque no lo creas, no es difícil de encontrar a alguien preocupado por su peso y con el autoestima herida por no encajar en los estándares de belleza. Lo malo de ello es que nos han hecho creer que sólo hay una línea a seguir, un sólo modo de verse. Cuando en la variedad está el encanto de nuestra especie. ¿Por qué permitir que unos kilos de más o de menos me definan? Seguramente eres grácil en muchos aspectos, seguro tienes virtudes más potenciadas que en otras personas, es probable que haya un detalle especial en tu modo de desenvolverte, pero te niegas estas riquezas de ti misma. Por ejemplo, yo no soy delgada ni esbelta, tampoco robusta, pero tengo detalles que se pueden mejorar, y aún así, pienso que tengo mi atractivo. También tuve épocas en que no me aprecié lo suficiente, pero hoy en día sé que soy más de lo que se percibe, soy más que una imagen. Y aún así, cuido un poco más de mi cuerpo, este templo sagrado. Cuídate, pero para estar sana, no para complacer al mundo. No te compares más, pule tus encantos naturales. Sácale provecho a lo que ya posees.
Ay te entiendo tanto, yo igual estuve una vez a punto de llegar al 70, alcance a pesar 68,8 reaccioné y baje hasta 63, y acá estoy con 65 y algo jaja subi pero al menos no volvi a llegar a ese 68 y no quiero volverlo a ver, te entiendo, a mi igual me pasa que como o me salgo un poco y puummmm subo mucho, odio tener este metabolismo o lo que sea, yo igual pronto regreso a la universidad, espero controlarme ya que la ansiedad y el estrés me la ganan muchas veces.
ResponderEliminarMe pasa igual, eso de pesarme dia a dia y mirarme al espejo, me da por temporadas, como por ejemplo ahora que quiero bajar de peso, me subo a la pesa a diario incluso tengo la intension de medirme la cintura e ir bajandola, necesito una hincha jaja
cariños y mucho animo que podemos juntas apoyandonos